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El cáncer es la manifestación de tu cuerpo cuando perdió la capacidad de desintoxicar, regenerarse y reciclarse.

Llevamos más de 70 años yendo en el sentido contrario a la vida.

Más de 70 años que decidimos jugar a ser Dios y cambiar todo aquello que creó para dar y mantener la vida, por algo que tan sólo nos permite sobrevivir y mantener enfermedades crónicas.

Nos damos de cabeza todo el tiempo con la misma piedra, pensando que los medicamentos, tratamientos, suplementos o remedios naturales, son la solución al problema que nosotros mismos hemos creado, pero lo único que estamos haciendo es, hacer la bola más grande.

El único que tiene la capacidad de sanar es tu propio cuerpo, ni siquiera yo conozco terapeuta de la salud que pueda sanarte, ya que solo recetan medicación para aminorar la dolencia.

Cuando un cáncer aparece es tu propio cuerpo incapaz de hacer el trabajo para el que fue creado.

Un cuerpo que no puede dormir, que no puede desintoxicarse, que no puede regenerarse o reciclarse, es un cuerpo inútil, pero muy fértil para la enfermedad.

Todo esto se resume en pocas palabras…

Si le quitas al cuerpo sus fuentes de energía, esas fuentes de las que obtiene su alimento, electrones, protones y fotones y además las sustituyes por las fuentes equivocadas y en el momento inadecuado, todo deja de funcionar.

A ver si entendemos de una vez que es la Luz, la del Sol, en todos sus espectros, el magnetismo y energía de la tierra los que realmente nos permiten vivir y no enfermar.

La luz es la que hace que tu cuerpo se desintoxique, se regenere, se recicle, porque gracias a ella nuestro cuerpo transforma esa energía en otra con la que puede formar hormonas, proteínas, células, agua, incluso luz, que son las encargadas de dirigir la gran orquesta metabólica.

Que podemos ayudarle con cosas externas, por supuesto, y más cuando ya está en un estado muy grave, pero nada de eso funcionará si lo importante no lo hacemos….

El ambiente de luz define la vida, pero siempre que sea el adecuado, o por el contrario, definirá la enfermedad y el fin de la vida.